Sí. La cobertura de responsabilidad civil privada te protege frente a los daños que tu mascota pueda causar a terceros. Cubre tanto los daños personales (por ejemplo, una mordedura) como los daños materiales (si rompe algo), garantizando tu tranquilidad ante cualquier imprevisto.
En caso de que tu perro sea de una raza catalogada como potencialmente peligrosa, las coberturas podrían variar, consúltalo con nuestros agentes.